Labor Parlamentaria

“Honorable Cámara:

Tengo a honra informar sobre la participación del diputado señor Roberto León , Presidente del Grupo Interparlamentario Chileno , y las diputadas señoras Isabel Allende , Marcela Cubillos , Carolina Goic, María Antonieta Saa y Alejandra Sepúlveda en la Reunión Parlamentaria que se llevó a cabo en forma conjunta entre la Unión Interparlamentaria y la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW) de Naciones Unidas, cuyo tema central fue “El papel de los Parlamentos en la promoción de un reparto igualitario de las responsabilidades entre hombres y mujeres”, realizada en Nueva York, Estados Unidos, el día 4 de marzo de este año.

El señalado tema se centró básicamente en el rol que les compete a los Parlamentos en cuanto a la promoción de un reparto más equilibrado de las responsabilidades entre hombres y mujeres en la ayuda y cuidado de la familia.

De conformidad con la Declaración de Beijing [1], el reparto equilibrado es fundamental para el bienestar, tanto de hombres como de mujeres y de los integrantes de sus familias y por tanto resulta esencial para la consolidación de la democracia.

Desde esa perspectiva, se analizó la manera en que los Parlamentos pueden contribuir mediante la dictación de legislaciones que tiendan a estos objetivos y muy especialmente en cuanto a aumentar la participación de las mujeres en la política. Asimismo, y de acuerdo con la temática de la Comisión especializada de Naciones Unidas, también se analizó el reparto de responsabilidades incluyendo el cuidado en el contexto del VIH/Sida.

I. AGENDA.

La agenda contemplaba una visión general sobre el tema del 53er Período de Sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, relativo a la repartición equitativa de las responsabilidades entre hombres y mujeres y específicamente en cuanto dice relación con los cuidados dispensados en el contexto del VIH/Sida.

La reunión parlamentaria se desarrolló en base a cuatro paneles, como se indicará a continuación:

1. La interrelación del trabajo remunerado y no remunerado, tema que fue analizado al tenor de aspectos como:

Valor y cuantificación de la prestación de los cuidados (trabajos no remunerados y remunerados).

Vínculos entre las responsabilidades no remuneradas en materia de prestación de cuidados y acceso a la educación, ingreso, participación en la vida pública, seguridad social y prestaciones sociales.

2. Edificación de un marco protector y propicio para los trabajadores con responsabilidades familiares, cuya discusión incluyó, además, materias como:

Licencia por maternidad, paternidad y licencia de los padres, horarios de trabajo flexibles (tiempo parcial, etc.), desarrollo de guarderías infantiles en el lugar de trabajo, etc.

El papel de los parlamentos en la promoción de una legislación, políticas y presupuestos para la prestación de cuidados, y alentar el reparto, en condiciones de igualdad, de las responsabilidades entre hombres y mujeres, en particular de los cuidados dispensados en el contexto del VIH/Sida.

Por nuestro país intervino como panelista la diputada señora Isabel Allende , quien destacó que a pesar de los avances y de la toma de coincidencia continuaban existiendo profundas desigualdades de género.

Argumentó que la decisión política de los gobiernos y la voluntad de legislar de los parlamentos resultaban esenciales. Citó el ejemplo de Chile, relativo al programa que garantiza el acceso al 40% de las mujeres más vulnerables a salas cunas y jardines infantiles, de manera de facilitar su incorporación a la fuerza laboral.

Recordó que hacía 56 años las chilenas luchaban por el derecho a voto y que hoy Chile cuenta con una Presidenta de la República por primera vez en nuestra historia, lo que constituye un claro ejemplo respecto del cambio cultural experimentado, pero que sin embargo, aún persistían incontables barreras que impiden una responsabilidad compartida y equitativa entre hombres y mujeres.

De esta forma, acotó que las estadísticas demuestran que las mujeres chilenas son marcadamente urbanas y que la tasa de fecundidad ha disminuido a 2,6 hijos promedio y que la condición educativa ha experimentado un desarrollo importante.

Es así como un tercio de las mujeres mayores de 15 años participa en el mercado laboral, pero algo más de la mitad vive en condiciones de pobreza.

Precisó que el 52,5% de la base electoral está formado por mujeres, quienes integran más de la mitad de los padrones de la militancia partidaria. Sin embargo, sólo el 12,5% son alcaldesas; el 5,2% está en el Senado; y un 15% en la Cámara de Diputados.

Del mismo modo, señaló que la incorporación de la mujer al mercado laboral ha sido lenta y hoy representan el 40,3% del campo laboral y reciben, en promedio, un 30% menos de remuneraciones que los hombres en iguales condiciones profesionales.

A continuación, se refirió a los avances que el Gobierno y el Parlamento chileno han realizado para generar un reparto más equitativo de responsabilidades entre hombres y mujeres.

En este orden de ideas, hizo un recuento, donde destacó que en el año 2005 se había incorporado un permiso paternal, de 5 días pagados, para que el padre pueda utilizar a su criterio desde el momento del parto o de la adopción de un hijo. Asimismo, comentó acerca de un proyecto de ley en tramitación, que otorga un permiso paternal prenatal de 3 días, que puede solicitarse desde cuatro semanas antes del parto. Por otra parte, se refirió a otro proyecto de ley que establece el fuero paternal, en las mismas condiciones que está reconocido para la madre, como una forma de dar estabilidad laboral al inminente padre en el caso de que la madre no tenga la calidad de trabajadora.

Respecto de la Ley de Acoso Sexual del año 2005, formuló un resumen de sus principales objetivos. Se refirió a la tipificación del delito, a los distintos mecanismos de protección, incluido el procedimiento de tutelas de los derechos fundamentales. Subrayó el hecho de que las sanciones debían incorporarse en la regulación interna de cada empresa y que podían llegar hasta la sanción de despido del trabajador o trabajadora acosador, sin estar contenidas en el respectivo reglamento interno de la empresa y sin derecho a indemnización.

Otro importante cuerpo legal lo constituye la ley de violencia intrafamiliar, que clarificó en mejor medida el concepto, estableció medidas de protección para sus víctimas y aumentó las sanciones a los agresores. Se estableció el delito de maltrato habitual que castiga con cárcel la violencia psíquica y física ejercida habitualmente; elevó las sanciones por este tipo de conductas, aumentando en un grado las penas de privación de libertad, en caso de lesiones causadas por violencia intrafamiliar; otorgó mayores garantías de obtener protección para quienes denuncien maltratos, así como la obligación del agresor de abandonar la casa; la prohibición de que se acerque a la víctima, a su casa o a su lugar de trabajo, así como a cualquier otro lugar al que ésta concurra o visite habitualmente; la obligación de asistir a terapia; y la facultad concedida a la policía para incautar toda clase de armas, aun cuando posea autorización para tenerlas.

Recordó que la Presidenta Bachelet , al asumir en marzo de 2006, creó el primer gabinete paritario de la historia de Chile y declaró que: “La paridad no sólo constituye un medio para promover una mayor participación de la mujer en distintos ámbitos de la vida en sociedad, sino también debe ser vista como una herramienta esencial para la profundización y perfeccionamiento de nuestra democracia. Por tanto, hablar de paridad, en consecuencia, implica hablar de una democracia más profunda y efectiva”.

Esta medida se ha conservado proporcionalmente y ha influido al instalarse en el imaginario colectivo como una demanda permanente, aunque hoy en día no se cumpla a cabalidad en la mayoría de los espacios públicos y privados.

Del mismo modo, mencionó el proyecto de ley de cuotas, cuyo objetivo principal es fijar un piso mínimo del 20%, como base de representación de las mujeres en todos los cargos de elección popular.

Otro importante avance lo constituye la “ley de amamantamiento” que reconoce a todas las madres trabajadoras el derecho a contar con una hora para alimentar a sus hijas e hijos de menos de dos años. Ello, con independencia de que la empresa no cuente con sala cuna, por no estar encuadrada en la obligación de tenerla al contar con menos de 20 mujeres trabajadoras, y pudiendo ejercer ese derecho en la sala cuna o en el lugar en que se encuentre la niña o niño. Teniendo en cuenta que estos derechos maternos suelen dar pábulo a formas de discriminación en la contratación de mujeres, también, forman parte del debate otras iniciativas legales, como la que establece derechos correlativos para los hombres, como por ejemplo, aquella que propugna reconocer al padre como posible beneficiario del derecho de alimentación, y ese mismo espíritu anima a otra propuesta que extiende el derecho a sala cuna al padre trabajador.

Otra importante medida es la introducción de un Código de Buenas Prácticas Laborales con equidad de género, dirigida al sector público y al sector privado, que considera diferentes aspectos como: (1) Procesos de reclutamiento y selección; (2) Desarrollo de carrera y acceso a la capacitación; (3) Representación equilibrada entre hombres y mujeres en los cargos de jefatura y de responsabilidad directiva; (4) Condiciones de trabajo; (5) Protección de los derechos de maternidad y responsabilidades parentales; (6) Conciliación de responsabilidades laborales con obligaciones familiares; (7) Prevención y sanción del acoso laboral y/o sexual en el trabajo. Todas ellas desde una perspectiva de derechos laborales y responsabilidad social empresarial. Sin embargo, su implementación ha sido lenta, especialmente en el sector privado que sólo se ha limitado con cumplir con lo estrictamente legal y prioritariamente respecto a la compatibilización trabajo-familia y pocas veces considerando la participación del padre.

Otro aporte importante lo constituye el relativo a las medidas en torno al cuidado infantil, a través del Programa Chile Crece Contigo, que otorga apoyos diferenciados a todas las niñas y niños, desde la gestación hasta los 4 años, como asimismo, la extensión horaria de los consultorios de salud, que cumplen el mismo objetivo de protección social. Ello ha implicado que el 2006 se contaba con 760 salas cunas públicas y al 2010 se llegará a 3.100 locales. Asimismo, la ley ha ampliado el derecho de amamantamiento o alimentación para hijos menores de dos años, a todas las mujeres que trabajan.

En el ámbito de la Reforma Previsional, se ha introducido la entrega de un bono para cada hijo nacido vivo como reconocimiento al valor de la maternidad, y se sumó una pensión básica para aquellas mujeres que nunca accedieron a un trabajo remunerado y por tanto, tampoco a un ahorro previsional. Con ello, también se ha valorado el trabajo doméstico, que normalmente implica el cuidado de los hijos y también el cuidado de las personas dependientes.

Otra iniciativa en análisis, que cuenta con un apoyo transversal, pretende alargar el posnatal para efectos de lactancia materna de 84 a 180 días, pese a que la Ministra del Trabajo ha alertando que esta medida podría significar una baja en la tasa de participación femenina en el mercado laboral.

También, dentro de las iniciativas en actual tramitación, está el que posibilitará definir qué apellido se quiere llevar, ampliando la opción de tener en primer lugar el apellido de la madre, a través de la modificación de las normas sobre cambio de apellidos.

Por último, destacó que los resultados del Ranking Global de Equidad de Género del Foro Económico Mundial (WEF) de 2008 consigna que Chile ocupa el puesto Nº 65, avanzando 25 lugares, producto fundamentalmente de la participación de las mujeres en cargos públicos, y ello está relacionado directamente con la dirección que ha ejercido la Presidencia de la República señora Michelle Bachelet , sin perjuicio de que aún restan importantes temas pendientes y avances sustantivos para que las mujeres chilenas tengan un reparto equitativo de las responsabilidades con los hombres de nuestro país que sea efectivo.

3. Cambiar las mentalidades y los comportamientos, a través de temas como:

Lucha contra los prejuicios de las mujeres y los hombres sobre sus respectivos roles.

Implicar a hombres en las responsabilidades compartidas.

4. Hombres y mujeres en política: conciliar las responsabilidades de la vida pública y de la vida privada, tema analizado desde las siguientes perspectivas:

Medidas adecuadas para ayudar a las mujeres y hombres a conciliar responsabilidades familiares y públicas (en tanto que candidatos en las elecciones y parlamentarios).

Derechos de los parlamentarios en materia de licencias y prestaciones.

Los hombres parlamentarios en tanto que modelos a seguir (en materia de utilización de la licencia por paternidad y la licencia de los padres).

La diputada señora Carolina Goic , a su vez, concordó con la visión histórica del trabajo que desarrollan las mujeres y señaló que el desafío consistía en cómo seguir avanzando en esta senda de equidad de género. Se refirió específicamente al valor y reconocimiento que tiene este tipo de trabajo y a su aporte en la economía y también en la incidencia que ello tiene en épocas de crisis, como la que la se presenta en la actualidad.

Se pronunció acerca de la necesidad de reconocerles derechos. A continuación se refirió a la experiencia chilena y a los avances alcanzados en este sentido durante el gobierno de la Presidenta Bachelet . Destacó que en el fondo se trata de encontrar la manera de compartir las responsabilidades lo que implica efectuar cambios a largo plazo. Se refirió a las reformas previsionales chilenas, como el reconocimiento a aquellas mujeres que no han impuesto al otorgárseles una pensión solidaria.

Destacó que el 40% más pobre de las chilenas pudo alcanzar este beneficio gracias a la reforma legal, cuyo monto alcanzó a alrededor de US$ 125, beneficio que se aplica a aquellas mujeres aunque nunca hayan trabajado en forma remunerada. También se refirió a la normativa mediante la cual se otorga una asignación por hijo nacido vivo. Finalmente, hizo alusión al desafío que implica hacer frente a la actual crisis económica mediante el sistema de subsidios al empleo, para aquellas mujeres trabajadoras que pertenecen al sector más vulnerable y que por tanto se ven mayormente afectadas en momentos de crisis.

La diputada señora Alejandra Sepúlveda formuló algunos comentarios en relación con la presentación que hizo el señor Andrew Levack , Co-Presidente de MenEngage Alliance y Director de Men As Partners , EngenderHealth, la cual se adjunta como Anexo N° 2.

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Sala de la Comisión, a 24 de marzo de 2009.

(Fdo.): JACQUELINE PEILLARD GARCÍA , Dirección de Asuntos Internacionales”.