Labor Parlamentaria
Participaciones
Disponemos de documentos desde el año 1965 a la fecha
Antecedentes
- Cámara de Diputados
- Sesión Ordinaria N° 21
- Celebrada el 16 de julio de 1969
- Legislatura Ordinaria año 1969
Índice
Intervención Petición de oficio
SITUACION DEL FUNDO "LA ESPERANZA", DE LA COMUNA DE LA ESTRELLA (COLCHAGUA).REPLICA A OBSERVACIONES DEL SEÑOR ANATOLIO SALINAS.- OFICIO
Autores
El señor
Pido la palabra.
La señorita SAAVEDRA (Presidenta accidental).-
El señor Maturana tiene la palabra.
El señor
Señorita Presidenta, en la Hora de Incidentes de la sesión celebrada el miércoles pasado, mi colega don Anatolio Salinas se refirió a un fundo de la provincia de Colchagua que es un verdadero orgullo para el país, pidiendo que se oficiara al Ministerio de Agricultura solicitando su inmediata expropiación por la CORA.
La pasión de que hizo gala el señor Salinas en su discurso...
El señor
¡Lo está ofendiendo, colega!
La señorita SAAVEDRA (Presidenta accidental).-
Señor Castilla, ruego a Su Señoría colaborar con la Mesa.
El señor
...sólo admite parangón con lo torcido de los argumentos e informaciones esgrimidos para justificar su encono.
El fundo aludido se llama "La Esperanza", está ubicado en la comuna de La Estrella, del departamento de Santa Cruz, y pertenece a la "Sociedad Agrícola La Esperanza de Marchigüe Limitada".
Comenzó su intervención el señor Salinas diciendo que cuando él era Gobernador del departamento, conoció el fundo "La Esperanza" debido a los numerosos reclamos que recibió de los obreros y campesinos. Así, de medias verdades, está plagado el discurso que contesto. Esta clase de procedimientos le sirve de andamiaje al señor Salinas para construir, con ciertos visos de verosimilitud, un enorme cúmulo de falsedades. Habla de la existencia de numerosos reclamos. Esto, además de ser falso, es tendencioso. Nada cuesta interponer reclamos. Reclamar es fácil. Lo que no es tan sencillo, es probar la justicia de los cargos que se formulan, demostrar que se está en la razón cuando se presenta un reclamo.
La Cámara puede estar cierta de que nunca ha prosperado reclamación alguna en contra del fundo "La Esperanza" en las relaciones laborales. Jamás ha incurrido ese fundo en sanción alguna por incumplimiento de las leyes sociales. La razón es una sola y muy simple. A pesar del empeño de Gobernadores candidatos, de promotores, asesores y activistas del Partido Demócrata Cristiano por perturbar las labores agrícolas y poder encontrarle la más mínima infracción, el fundo "La Esperanza" cumple fiel, estricta y oportunamente todas sus obligaciones. Tanto es así, que el propio ex Gobernador candidato, y hoy Diputado en ejercicio, después de exponer algunos hechos, que piadosamente calificaré de "equivocados", sólo atina a pedir la expropiación del fundo "La Esperanza". Pequeña y mezquina revancha que ejercita como venganza, debido a que la mayoría de los obreros de ese fundo votó por mí para Diputado, y casi todos los demás por nuestro colega señor Joel Marambio.
-Risas.
El señor
Esto es lo que le duele a la Democracia Cristiana: comprobar cómo, a pesar del derroche de los dineros de los contribuyentes, de la intervención descarada de todas las autoridades y de los funcionarios semifiscales para llegar a controlar las organizaciones sindicales, sus esfuerzos denodados, luego de un primer instante promisorio, sólo han conocido después el más rotundo de los fracasos.
Aunque el señor Salinas procure disfrazar su pensamiento íntimo, éste emerge nítido de su intervención del miércoles pasado. Lo que a él lo alarma es que el sindicato "El Despertar Campesino", de La Estrella, que tanto trabajo y dinero le costó a la Democracia Cristiana, se esté desintegrando rápidamente. Creado por el Partido de Gobierno, no como organismo social, sino como instrumento político, muchos de sus miembros han renunciado o, simplemente, se han retirado de él. La mayoría de éstos ha ingresado francamente a los partidos políticos del FRAP.
Pero el problema del sindicato de "La Estrella" no le preocupa en absoluto al fundo "La Esperanza". Designado como "predio piloto" por el Servicio Agrícola y Ganadero del Ministerio de Agricultura, lo que le interesa es crear más y mejores productos. No le inquieta el hecho de que ocho de sus obreros, de los veintidós permanentes que trabajan en el fundo, pertenezcan al sindicato democratacristiano comunal. Hay completa libertad: en "La Esperanza" para ingresar a esta clase de organismos. El que quiere, entra; el que no quiere, no; el que se aburre, renuncia; el que está conforme, se queda. En nada altera todo esto el plan de trabajo del fundo.
Sin embargo, debo reconocer que es vox populi en la zona la mala situación del sindicato, cuyas autoridades fueron elegidas en la misma reunión en que se proclamó en febrero a los candidatos a parlamentarios del Partido Demócrata Cristiano. Comprendo, pues, la angustia del señor Salinas, y me explico que trate de encontrar toda clase de culpables y de perseguidores imaginarios del sindicato de su partido, al que nadie le da mucha importancia en la provincia.
Pero mi comprensión no llega a tanto como para excusar que la decepción alcance al falseamiento de la realidad. Y esto es lo que, por desgracia, ha hecho el señor Salinas con sus medias verdades, alusiones e insinuaciones. Pruebas al canto. Dice que a un obrero que dirigía la organización del sindicato en "La Esperanza", lo tuvo preso el fundo por giro de cheques sin fondos, aprovechándose de la existencia de un homónimo suyo en Curicó. Esto es falso, y lo que es más grave, el señor Salinas lo sabe perfectamente.
Nadie, que no sea muy ignorante o de muy mala fe, desconoce que el giro doloso de cheques es un delito de acción privada que sólo puede ejercitar el ofendido o perjudicado. Nadie en "La Esperanza" tenía cheques protestados del señor Jara de Curicó, y, en consecuencia, nadie podía querellarse en su contra. Lo que en realidad ocurrió fue algo diferente. En contra de Manuel Jara Cornejo se entabló una querella en marzo de 1967 por hurtos reiterados. Al pedirse sus antecedentes en Investigaciones -porque pertenece a una familia con numerosos problemas judiciales-, resultó que había dos órdenes de detención, aparentemente en su contra, por giro doloso de cheques. Detenido por los hurtos, la justicia quiso hacer que respondiera también por los cheques, mientras no se aclaró el alcance de nombres.
También es falso que el obrero Jara hubiera sufrido días de cárcel por haber pretendido organizar en sindicato a sus compañeros de "La Esperanza". Jamás ha habido y, salvo que se cambie la ley, tampoco habrá jamás sindicato propio en "La Esperanza", por la sencilla razón de que no hay suficiente número de obreros para poderlo constituir. Nunca fue Jara un organizador sindical, y sólo transcurridos 5 meses después de su despido en marzo de 1967 por hurto, o sea, en el mes de octubre, los promotores democratacristianos del departamento de San Cruz lo hicieron elegir director del dócil instrumento sindical del partido en La Estrella, el famoso "Despertar Campesino", cuya agonía tanto entristece ahora a don Anatolio.
Hace más de dos años que Manuel Jara fue despedido de "La Esperanza". Aún permanece allí. Hay orden judicial de desalojo, con auxilio de la fuerza pública, pero el Gobernador se niega a concederla. Hace más de dos años que no trabaja en el fundo, pero todavía vive en una de sus casas y tiene sus animales gratis a talaje dentro de él. Podría irse a vivir a la casa y parcela que ha adquirido en Pichidegua, pero prefiere continuar en "La Esperanza'.'
Vale la pena hacer ahora un paréntesis para decir que, a pesar de la catástrofe de 1968, que secó por primera vez en 80 años el gran tranque colector de aguas lluvias de "La Esperanza", a pesar de la pérdida total de las siembras, a pesar de la gran mortandad de ovejas, corderos y vacunos, y a pesar de la falta de trabajos que acarrearon esas calamidades, a nadie se ha despedido en el fundo. La sociedad propietaria ha tenido que endeudarse enormemente para poder pagar salarios, para comprar raciones de alimentos cosechados a fin de dárselas a sus obreros y para adquirir forraje que impida la muerte de todos sus animales. A pesar de todo esto, no ha habido ningún despido, ni reducción de faenas.
Este esfuerzo de los dueños, debidamente apreciado por los obreros de "La Esperanza", unido a la inoperancia del sumiso utensilio sindical de la Democracia Cristiana, llamado "El Despertar Campesino", es el que está provocando las renuncias de los obreros agrícolas de la comuna de La Estrella. Sostener lo contrario y achacar el éxodo sindical a una imaginaria persecución patronal, es querer, voluntaria y deliberadamente, engañarse o engañar.
En más de diez años no se ha despedido a nadie de "La Esperanza". La única excepción es la de Manuel Jara, a quien se le comprobaron hurtos reiterados y sucesivos, pero que tampoco se ha ido.
Si, como lo desea el señor Salina, la CORA expropiara "La Esperanza", lo primero que haría, al igual que en casi todas partes, sería despedir al exceso de personal que hoy trabaja en el fundo. Esto lo saben perfectamente todos los obreros. Conocen lo ocurrido en El Huique, en Yáquil y en numerosos asentamientos de la provincia. Es por ello que el órgano sindical democratacristiano de La Estrella tiene tantas dificultades para recolectar adeptos.
Deseo recoger algunos casos y ejemplos citados por el señor Salinas en la sesión del miércoles pasado. Comenzaré por la truculenta historia de la harina con tánax. Insinuando aquí, callando allá, el señor Salinas, con argumentos retorcidos y especiosos, pretende hacer creer a la Cámara que los instintos criminales y la crueldad de los dueños de "La Esperanza" llegan a tal extremo, que con un trigo agorgojado, al cual se le había aplicado Tánax para matar los bichos, se fabricaban deliberadamente la harina y el pan de los trabajadores del fundo. Lo inaceptable es que el señor Salinas sabe que esto es falso. Lo sabe y la consta porque en su visita a "La Esperanza" como Gobernador y pre candidato, pudo imponerse personalmente de que lo que en verdad había ocurrido era algo totalmente distinto.
Empiezo diciendo que es falso que el trigo para hacer la harina estuviera agorgojado. En seguida, creo indispensable dar conocer que del trigo que se muele en el fundo sale la única harina con que se fabrica el pan para todos los habitantes de él, desde la del socio administrador y su familia, hasta la del capataz, empleados, ovejeros y obreros de "La Esperanza". La misma harina sirve a todos; no hay otra.
¿Cuál es en este caso la media verdad del señor Salina? Un percance sensible, un accidente que afectó a un solo saco. Días después, junto con otras partidas, se molió ese trigo. Ramón Puga, uno de los miembros del sindicato e incondicional del partido de gobierno, seguramente advirtió que una pequeña cantidad de la harina había adquirido mal olor, pero se cuidó bien de guardar un culpable silencio para poder provocar después un conflicto.
Recuérdese que el fundo no da ración de pan, sino dos kilos diarios de harina para que cada cual haga con ella lo que se le antoje. La partida con mal olor era muy pequeña, y los que reclamaron recibieron inmediatamente otra ración a su gusto. Dos o tres de los reclamantes -precisamente los activistas del Gobernador candidato, entre los cuales estaba el molinero- manifestaron que no importaba y se negaron a cambiar la harina. Con parte de ella hicieron pan que llevaron a la Gobernación de Santa Cruz, junto con la harina sobrante, para reclamar en contra del fundo.
Llegó el Gobernador a "La Esperanza" y, a pesar del cariño que ha demostrado tenerle a ese predio, no pudo menos que convencerse de que se trataba de un accidente sin importancia ni trascendencia. Si lo hubiera tenido, calcule la Honorable Cámara cuál habría sido la reacción del Gobernador candidato y cuáles las sanciones civiles y penales que le habría aplicado al fundo por envenenador del pueblo, de los trabajadores explotados y hasta del dueño explotador. Si nada hizo entonces el Gobernador candidato, cuando podía hacerlo, ¿por qué, después de más de dos años, viene ahora a contarnos ese cuento viejo y superado? Es una falta de respeto a esta Honorable Cámara considerarla tan estólida como para tragarse ese infundio.
Dijo también el señor Salina que con Francisco Javier Errázuriz, administrador de "La Esperanza", había despedido a doce campesinos sindicados. Eso es falso, y el señor Salinas sabe que lo es. Existe la ley de inamovilidad, y si a él le consta que el señor Errázuriz la ha violado, denúncielo a la justicia y no traiga aquí cuentos absurdos, sin ningún fundamento. En la última década -repito-se ha despedido en "La Esperanza" a una sola persona, y de esto hace más de dos años. ¿Qué derecho tiene el señor Salinas para tratar de engañar a sabiendas a sus colegas? Esta es una nueva falta de respeto a la Honorable Cámara.
En otra parte de su discurso, afirmó el señor Salinas que en "La Esperanza" el salario era de Eº 4,50 diarios. Esto también es falso, y también lo sabe el colega. Otra media verdad que cargar en su cuenta. Hasta el 30 de abril pasado, fecha de término del convenio colectivo, la remuneración, incluyendo regalías, podía estimarse en Eº 20 diarios y la parte en dinero alcanzaba a Eº 4,50. Pasado el 30 de abril, el administrador ofreció a sus obreros reajustarles el salario en tanto cuanto hubiera subido el costo de la vida. La gran mayoría aceptó, salvo el grupito democratacristiano que tan fácilmente engaña al señor Salinas. Ese grupito rechazó el reajuste, porque manifestaron que iban a presentar un pliego de peticiones solicitando mucho más. Son los únicos que aún reciben el mismo salario de 1968 y el pliego anunciado todavía no lo presentan.
Sostiene el señor Salinas que las casas de "La Esperanza" no tienen letrinas, a pesar de que cuando él era Gobernador y candidato había enviado varias veces comisiones, dando plazos perentorios para que se cumpliera con esas normas higiénivas. Nueva falsedad de mi colega. Todas las casas de los trabajadores de "La Esperanza" tienen letrinas, y las casas están recién revisadas y arregladas. El cariñoso interés del Gobernador candidato por "La Esperanza", enviándole periódicamente comisiones inspectivas, carecía de finalidad útil, ya que las letrinas no son de quita y pon. Por lo demás, las casas de "La Esperanza" cumplen con los requisitos que la ley exige, y esto lo declaró la autoridad competente, que no es la Gobernación que servía un candidato a Diputado.
Entro ahora a ocuparme de un asunto que no honra a mi colega. Me refiero a su denuncia sensacionalista sobre la existencia de varias casas de dos o tres piezas en "La Esperanza", en las cuales viven tres familias y en cuyas camas duermen tres o cuatro personas. Lo probaré. En la visita que como Gobernador y aspirante a Diputado realizó hace dos años a "La Esperanza" el señor Salinas, se le formuló idéntico reclamo por los que se decían simpatizantes o militantes de la Democracia Cristiana. Se le aclaró entonces al candidato que se trataba de dos casos en que las hijas de dos inquilinos del fundo se habían casado con jóvenes afuerinos y éstos, en vez de llevarse a sus cónyuges a sus tierras, se habían quedado en "La Esperanza" viviendo en casa de sus suegros. A pesar de sus deseos de congraciarse con sus posibles electores, el entonces Gobernador, en un gesto laudable y ante varios testigos, enrostró a los reclamantes su falta de razón y no sólo desestimó públicamente el reclamo, sino que al despedirse del administrador señor Errázuriz, se lo repitió privadamente.
El Diputado señor Salinas, después de dos años, trae a la Cámara como denuncia sensacional el mismo reclamo que rechazó por improcedente el GobernadorAnatolio Salinas. Tengo, pues, derecho a decir que su actitud actual no es honrosa.
Dijo también el señor Salinas que había tenido en sus manos las libretas del Seguro de los trabajadores de "La Esperanza" y que les faltaban las estampillas de mayo y junio. He aquí otro ejemplo de media verdad para hacer creer una cosa falsa. El colega quiere dar la impresión de que todas las libretas estaban atrasadas en sus imposiciones y por eso cuida bien de no decir cuántas libretas tuvo en sus manos el domingo antepasado. Yo se lo diré a la Honorable Cámara derechamente. El domingo 6 de julio había sólo cuatro libretas fuera de la oficina del fundo. De éstas, una tenía todas sus estampillas y las otras tres las habían pedido sus dueños sin devolverlas, por lo que resultaba imposible colocarlas las estampillas correspondientes. En consecuencia, el señor Salinas sólo pudo tener dos de "La Esperanza', y ellas corresponden a sus correligionarios, que fabricaron intencionalmente este reclamo al no devolver oportunamente las libretas, quedándose con ellas.
Vale la pena manifestar que todas las imposiciones del Servicio de Seguro Social las hace "La Esperanza" regular y oportunamente y que aún tiene de plazo todo el mes de julio para efectuar las de junio. Acompaño un certificado de la oficina del Servicio de Peralillo, que destruye toda la maquinarias fraguada. Voy a leerlo. Dice:
"El Jefe del Servicio de Seguro Social de Peralillo certifica que la Hacienda La Esperanza de la Comunidad Pereira y Errázuriz da debido cumplimiento a las disposiciones de la ley 10.383 y D.F.L. 243 y 245 mensualmente y en forma legal.
"El pago de las imposiciones y asignaciones familiares no han sufrido nunca un atraso y han sido canceladas oportunamente y dentro de las fechas que corresponde.
"Es de justicia dejar debida constancia que esta Hacienda nunca ha tenido en esta Oficina reclamo de parte de los obreros por incumplimiento de las leyes previsionales y por no pago de asignaciones familiares.
"Otorgo el presente certificado para los fines que los interesados estimen por conveniente.
"Servicio de Seguro Social.- Mario Cardemil Riveras, Agente."
"Peralillo, julio 11 de 1969."
Me referiré ahora a la luz eléctrica y diré, de paso, que no es cierto que a una sola casa se le haya dado este servicio. Sin costo alguno para los beneficiados, se han hecho instalaciones eléctricas en siete casas, a las cuales no se les cobra ningún consumo. Sin embargo, demuestra el señor Salinas una ignorancia abismante al creer que este beneficio puede hacerse extensivo a todas las casas del fundo.
"La Esperanza" es un predio de secano, de gran extensión, con pocas tierras arables y apto, especialmente, para ovejería. Si el señor Salinas pudiera agrupar todas las casas en un radio cercano al transformador, es posible que la potencia de éste alcanzara para dar luz -no para estufas, planchas ni cocinas eléctricas-, a casi todas las casas. Pero, como esas casas están diseminadas en los diversos potreros, no es posible llevar la luz en línea de baja tensión a lugares distantes varios kilómetros.
Para darle más color a su discurso, el señor Salinas nos leyó una carta escrita por Antonio Cornejo Arias y por la persona que la Democracia Cristiana ha ubicado como Presidente del sindicato "El Despertar Campesino" de La Estrella, don Juan Manuel Osorio. La carta podrá ser sumamente patética, como que en su elaborada redacción y cuidadosa faltas de ortografía deben haber contribuido varios escritores criollistas; pero lo cierto es que Antonio Cornejo Arias no es ni ha sido trabajador de "La Esperanza" y, en consecuencia, mal ha podido el fundo quitarle un trabajo que nunca le había dado. Este es uno de los afuerinos que se casó con la hija de un inquilino y que el ex Gobernador de SantaCruz, don Anatolio Salinas, increpó hace dos años. ¿Por qué tiene "La Esperanza" que darle trabajo y no el fundo del lado o el INDAP o la CORA en cualquier otro fundo, en cualquiera provincia del país?
De la carta escrita quien sabe por quien y que firman Antonio Cornejo y Juan Manuel Osorio, vale la pena recoger la afirmación contenida en su punto tercero. Ella constituye el colmo del cinismo y desparpajo, sobre todo respecto de Osorio, el dócil Presidente de;El Despertar Campesino".
Efectivamente, hace algunos años, se echaron abajo dos casas, porque habían perdido sus condiciones de seguridad a causa de fuertes temblores y, principalmente, debido a una inundación invernal que había cortado sus cimientos. Otra, deshabitada, permanece aún en pie, a pesar de su estado ruinoso. Los que las habitaban reclamaron, y con razón, por el peligro que corrían, y se les trasladó entonces a otras casas recién refaccionadas; y se desmantelaron primero, y demolieron después, las que amenazaban con derrumbarse. El habitante de una de las casas peligrosas y beneficiado con la mudanza fue Juan Manuel Osorio, el correligionario de don Anatolio Salinas y Presidente del sindicato de La Estrella. Ahora reclama por lo que antes exigió y obtuvo. La mala fe no puede ser más evidente.
Especial encono demuestra el señor Salinas al referirse al capataz del fundo, mi amigo Miguel Peñaloza Guerra...
El señor
¡Malos amigos tiene, colega!
El señor
¡Ese es el guardián!
El señor
Esto no es de extrañar, porque es típico de la Democracia Cristiana el desprecio por la clase media agrícola...
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor
...por los que, gracias a sus méritos y esfuerzos, han logrado labrarse una buena situación. Parecería que sólo los más flojos y los viciosos que jamás abandonan la más extrema pobreza fueran los únicos merecedores de atención y de ayuda...
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor
Sin embargo, no es con éstos sino con aquéllos con quienes se forja la grandeza de las naciones.
Miguel Peñaloza es un ejemplo de laborioridad, honradez y capacidad. Llegado muy joven a La Esperanza, fue escalando poco a poco todas las situaciones gracias a sus esfuerzos, perseverancia, sociedad e iniciativa. De peón campesino ha llegado hasta el puesto de capataz, ha formado un hogar modelo; ha educado bien a sus doce hijos, uno es técnico electricista, otro estudia para práctico agrícola y, en general, los mayores tienen un oficio útil y lo ayudan en sus labores. Peñaloza se ha formado una situación económica sino brillante, por lo menos holgada, tras 25 años de trabajo en un fundo donde se aprecian los méritos y en donde, a pesar de lo que diga, piense o crea don Anatolio Salinas, no se explota a nadie, sino, por el contrario, se ha ayudado siempre a quienes lo merecen.
A este hombre, digno por todos los conceptos, el señor Salinas lo califica de "negrero" y lo vilipendia, porque ha adquirido con sus ahorros dos camiones fleteros que trabajan sus hijos. Yo me honro con la amistad de un arquetipo de las virtudes chilenas como es Miguel Peñaloza, y lo señalo como ejemplo para las nuevas generaciones por su espíritu de empresa, su sobriedad, su aplicación al trabajo y su constante energía para superarse y progresar.
Creo haber destruido toda la falacia de las afirmaciones contenidas en el discurso pronunciado el miércoles pasado por el señor Salinas.
Ninguna de sus afirmaciones ha resultado ser verídica pero, con el mérito que les atribuye, ha pedido la expropiación del fundo La Esperanza. Con ella satisfaría la inquina que dimana de sus asertos tan errados como injustos.
Dije al comienzo de mi intervención que "La Esperanza" es un fundo modelo. Lo administra don Francisco Javier Errázuriz Talavera, ingeniero agrónomo y economista agrario, profesor de la Facultad de Agronomía de la Universidad Católica y uno de los profesionales jóvenes más preparados y eficientes que existen en el país. En el fundo se ha desarrollado una raza ovina de doble propósito: carne y lana, que es un orgullo para Chile.
La prolija y acertada selección que en "La Esperanza" se ha hecho del merino precoz alemán le ha dado a sus ejemplares una fama en Chile, en América y en Europa, que probablemente no tenga en su esfera respectiva, ningún otro producto nacional.
"La Esperanza" es un fundo de suelos pobres y de escasos recursos. Sin embargo, ha sido designado "predio piloto" por el Servicio Agrícola y Ganadero, y los dueños del fundo han logrado producir un verdadero milagro al mejorar la raza merino precoz...
La señorita SAAVEDRA (Presidente accidental).- Ha terminado el tiempo del Comité Nacional. Le vamos a dar los cinco minutos al señor Tagle.
El señor
Muchas gracias, señorita Presidenta.
El señor
En cuanto al fundo San José de Marchigüe, tiene menos de la mitad de la superficie que le atribuye Anatolio Salinas: está formado en su mayor parte por cerros y faldeos de la Cordillera de la Costa.
Pertenece a la sociedad agrícola San José de Marchigüe, compuesta por 14 socios, y cumple con todos los requisitos pedidos por la ley 15.020.
Situación social.- Ocupa 100 trabajadores entre empleados, inquilinos y voluntarios. Tiene 56 casas, 26 de ellas construidas en los últimos años. Los salarios están acordados por acta de avenimiento de 1968 en Eº 11,50, más la casa que vale por lo menos Eº 3, lo que daría Eº 14,50. A estos salarios se les ha ofrecido un 30% de reajuste, de modo que actualmente suben a Eº 19. Dentro de esta cantidad se incluyen talajes y raciones por un valor mayor que su avalúo, de modo que el salario real pasa de Eº 20, cifra bien distinta a los Eº 4 denunciada por el señor Salinas.
Aspecto Agrícola.- El fundo San José tiene realizado lo que el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) propicia como meta para la explotación de los cerros de la Costa. Sólo siembra trigo donde no hay peligro de erosión; conserva el arbolado natural, constituyendo un oasis en la zona; tiene una dotación de ovejunos Merino Precoz, de doble propósito, que ha contribuido a establecer en el país; tiene una rotacional de los pastos; tiene un criadero de reproductores finos y ha hecho varias importaciones de Alemania; ha establecido cerca de 500 hectáreas de praderas artificiales con trébol y gramíneas, aumentando enormemente la dotación animal; ha elevado agua con bombas regando empastadas y plantando una viña que da trabajo a 40 de los 100 trabajadores; ha construido galpones para pasto, bodegas y numerosas casas de inquilinos; tiene prácticamente todos sus cierres con malla de alambre; paga los mejores salarios de la zona y ha pasado la prueba del año seco sin disminuir por ello su personal, y sin que ellos sufran las consecuencias que la sequía ha traído para la mayor parte de los predios de la zona.
Señorita Presidenta, quisiera pedir un oficio para terminar.
En nombre del Comité Nacional, pido que mis observaciones sean transcritas al señor Ministro de Agricultura, para que él tenga en su poder la refutación de las afirmaciones falsas formuladas por el señor Anatolio Salinas el miércoles pasado.
La señorita SAAVEDRA (Presidenta accidental).-
Se enviará el oficio solicitado por Su Señoría.